LOS NIVELES
DE RUIDO SUPERAN LOS LÍMITES PERMITIDOS
El daño auditivo producido por los altos niveles de
ruido puede ser irreversible por lo que la prevención y la toma de conciencia
son fundamentales para disminuir el daño en las personas. En el centro, el
decibelímetro llegó a marcar hasta 96 decibeles.
Durante los últimos cinco años la Ciudad de La Plata ha registrado niveles
de ruido superiores a los permitidos por la Organización Mundial
de la Salud
(O.M.S). Esta contaminación sonora supera los niveles que puede soportar las
personas sin sufrir consecuencias. En la actualidad el tránsito y los boliches
bailables son los principales factores de ruido.
El último tiempo los platenses se han malacostumbrado
a soportar niveles superiores a los permitidos. “El nivel permitido de acuerdo
a la O.M .S,
establece que en las calles no debe superar los 65 decibeles para que la gente
viva psicoacústicamente bien, en confort psicológico”, dijo la Doctora en Fonoaudilogía
Silvia Bermúdez.
Si bien hasta 80 decibeles no se produce daño
auditivo, para vivir confortablemente no se debe superar los 65 decibeles,
explicó la Doctora.
Los principales causantes de contaminación provienen
de dos fuentes, las móviles y las fijas. El primer grupo esta integrado en su
mayoría por el transito vehicular. En el país, la ley nº 24.449 de Tránsito y Seguridad Vial
hace referencia a los requisitos para la bocina y para la emisión de ruidos.
Con respecto a la bocina, establecen un máximo de 104 dBA. “Lo que más afecta
son las motos con los caños de escape que hacen como tiros, los colectivos y
los autos con la música a todo lo que da”, manifestó Sergio, dueño del puesto
de diario de Diagonal 79 y Plaza San martín. El segundo grupo esta integrado
por los boliches bailables, los eventos deportivos, recitales, etc. Desde el municipio se está invitando a los padres por el
código de nocturnidad, que exige a los boliches y pubs la colocación de paneles
acústicos pero todavía no se ha implementado.
En ambos
casos los niveles han superado ampliamente los permitidos, llegando a casi 100
decibeles. Otros factores pueden ser los relacionados con lo doméstico como el
motor de los electrodomésticos o el uso cotidiano de auriculares.
Todos estos
factores pueden producir grandes daños en la salud de las personas, muchas
veces irreversibles. “Lo primero que aparee son los zumbidos en el oído, lo que
se denomina Acúfeno, que puede aparecer en alguien que se expuso a ruidos como
asistir a un recital”, informó la
Licenciada en Fonoaudiología Noelia Gwozdz. Esto puede ser
intercalado con jornadas de silencio para que así el oído se recupere,
desarrolló Gwozdz. Además del Acúfeno, se puede producir Hipoacusia, dejando
una disminución de la audición de forma definitiva.
A nivel del
organismo en general los principales problemas pueden ser alteraciones en el
sueño, trastornos de ansiedad, violencia, problemas gástricos, problemas
cardíacos, inconvenientes para concentrarse, alteraciones en la comunicación,
disfonías, etc. Esta contaminación sonora no solo afecta a las personas, sino
también a los animales. “En las Cataratas del Iguazú el ruido de los
helicópteros alejó a varias especies del lugar”, comentó a modo de ejemplo la Licenciada Gwozdz.
Otro factor es la pirotecnia que afecta mucho a los animales domésticos que son
más sensibles a los ruidos.
A modo de
prevención la Doctora Bermúdez
y la Licenciada Gwozdz
sostuvieron que en el caso de los recitales, eventos deportivos y boliches se
pueden realizar tapones protectores. Estos pueden ser los denominados “campana”
utilizados para la construcción. Otra alternativa es la realización de los
tapones acústicos a medida, tomando la forma del oído para luego
confeccionarlos de silicona, amortiguando el sonido unos 30 decibeles. “Es muy
importante la toma de conciencia de todos, tratar de controlar periódicamente
los artefactos de la casa, que los vehículos estén autorizados por la Verificación Técnica
Vehicular para que porten caños de escape autorizados, no tocar bocina porque
si, no utilizar el lavarropas a la madruga, etc.”, remarcó Bermúdez. Desde el
Colegio de Fonoaudiologos se realizan congresos para concienciar a la gente ya
que se cree que lo más importante es que todos contribuyan a disminuir el
nivel. Todos los cuartos miércoles de abril, para el día de la Conciencia del Ruido el
Colegio sale a la calle con el decibelímetro para registrar los niveles y así contribuir
con su propósito que es promover a nivel mundial el
cuidado del medio ambiente acústico y la conservación de la audición.
Ruido, algo cotidiano
Las calles
por de La Plata
que han registrado los mayores niveles de contaminación sonora son 7 y 50, 7 y
51, 8 y 50 y en general las proximidades del centro platense, son las calles
más ruidosas. A estas se le suman 12 y 54, la Terminal de Ómnibus,
Plaza Italia y Plaza Moreno. En estos
lugares, el nivel no bajado de 85 decibeles, aunque en 7 y 50 se ha llegado
registrar hasta 96 decibeles superando ampliamente el permitido. “Entre las dos
y las cuatro de la tarde se calma un poco, pero tanto a la mañana, al mediodía
o a las seis de la tarde se nota mucho más, al igual que los fines de semana”
resumió Sergio del puesto de diario próximo a Plaza San Martín.
El
daño auditivo es irreversible por lo que con una medicación o cirugía no se
recupera. Por esto mismo prevenir es lo fundamental para reducir los efectos de
una ciudad que se hace escuchar. “Muchas veces llego a mi casa y me duele la cabeza o le
grito a mi familia y eso es por acostumbrarse al ruido de la calle”,
manifestó Omar el pochoclero de Plaza San Martín.
En La Plata no hay todavía
legislación sobre los niveles de ruido permitidos. Si bien la gente que circula
habitualmente por los lugares más afectados hace referencia al malestar que el
ruido causa, es un problema al que todos nos vamos acostumbrando de algún modo;
algo que puede terminar siendo letal para nuestros oídos.
e164z2puqth395 g-spot dildos,sex toys,fantasy toys,Clitoral Vibrators,penis pumps,wholesale sex toys,sex chair,japanese sex dolls,dildo v928p0rxqtv293
ResponderEliminar