jueves, 1 de noviembre de 2012


La cantidad de palomas no disminuye en La Plata.
MUCHOS MÉTODOS, POCAS SOLUCIONES

La ciudad de las diagonales sigue siendo una de las más elegidas por las palomas para vivir. Los lugares afectados sufren grandes consecuencias y las alternativas que se les presentan para ahuyentarlas parecen no ser lo suficientemente afectivas para reducir la cantidad.

Los platenses juntos con los porteños son los más perjudicados por la cantidad de palomas torcazas. En el último tiempo se han  asentado con mayor intensidad en algunos lugares característicos de la ciudad. Esto ha originado conflictos como enfermedades, destrucción de fachadas, suciedad de los lugares públicos y a raíz de esto protestas vecinales.
Las palomas torcazas se han vuelto una plaga. La raza que ocasiona el problema es Columbia Livia y ha generado el malestar de muchísimos vecinos de la ciudad que de diferentes maneras tratan de ahuyentarlas.
Muchos utilizan métodos poco ortodoxos. “Algunos utilizan bolsas de nylon para asustarlas, otros colocan redes o mayas en sus balcones. En otros países se utilizan granos impregnados con hormona arnisteril, que es la marca registrada comercialmente, de la droga Nicarbazina”, dijo la Bióloga Laura Ferman.
Las palomas suelen dejar materia fecal por donde pasan y esto también es un problema ya que las enfermedades se trasmiten más rápido y fácil.
Entre las principales enfermedades se encuentran la ornitosis, enfermedades pulmonares, salmonelosis, cryptococcosis, histoplasmosis, piojos, pulgas, garrapatas, parásitos, problemas intestinales, problemas de piel, etcétera.
Estos problemas de salud son más peligrosos cuando la Columbia Livia se asienta en bandada en algún edificio, especialmente en los hospitales en donde el riesgo al contagio está más expuesto. Esto ocurre en el Hospital de niños, el cual posee una gran cantidad de ejemplares.
“El clima húmedo no influye en la cantidad, ya que la raza nidifica todo el año, pero el calor que comienza con la llegada de la primavera, hace el clima más propicio para que puedan conseguir con mayor facilidad agua y alimento, aumentando su reproducción”, explicó Ferman.
El ave se reproduce hasta 5 veces por año, dos huevos cada puesta. La tasa dependerá de cada zona de estudio pero una pareja puede tener entre 6 y 12 pichones por año en condiciones optimas y dependerá de la cantidad de parejas en cada zona.
Suele nidificar en los edificios, balcones o árboles, por lo que las solución más próxima es taparle los agujeros y huecos y no ofrecerles lugares para nidificar tapándoles con redes o mallas. “Soy trabajadora doméstica y cuando voy cada quince días a una casa el balcón está lleno de materia fecal de la palomas y la verdad que es un problema al cual todavía no se le ha encontrado una verdadera solución”, manifestó Graciela, empleada doméstica.
Durante los últimos años la cantidad de ejemplares a aumentado considerablemente en edificios como el Museo de Ciencias Naturales, el Pasaje Dardo Rocha o la Catedral. Ante estos asentamientos, las alternativas planteadas han sido muchas, como la utilización de águilas o la fumigación en los espacios públicos. Muchas de estas no han dado los resultados esperados y por el momento las aves siguen generando un problema para los ciudadanos.

Palomas financieras
En un principio las palomas eran utilizadas para la comunicación. Como explicó Jorge Otaola Corresponsal de Reuter, la agencia se fundó en 1851 y su creador, el alemán Paul Reuter, lo hizo mediante palomas mensajeras, las que utilizaba para enviar información financiera a unos pocos clientes interesados en datos rápidos. 
En la ciudad hay registro de las especies del orden “columbiformes”. Paloma domestica (Columbia Livia), la cual es plaga en el casco urbano. Paloma mancada, paloma picauro, torcaza común, tocazita común, yeruti común, estas ultimas no son plaga ni han generado invasión, aunque pueden serlo en el futuro, remarco Ignacio Aguirre.
Estas aves pueden ubicar comederos en un radio de 120 kilómetros, con centro en los dormideros y lugares de cría, movilizándose en bandadas de hasta 50 ejemplares. Cuando crían no se mueven tan lejos del nido, no dejan solas a las crías y la búsqueda de alimento es individual.
La base de la alimentación son las semillas. La torcaza come todo tipo de semillas pero tiene preferencias por las de sorbo. La paloma doméstica en las plazas come granos y otros alimentos derivados de estos como restos de pan, galletas, tortas, etcétera, según informo el COA La Plata.
Características del ave Columbia Livia:
  • Buenos voladoras y oportunistas.
  • Plumaje gris plomizo con dos franjas halares en las colas y cola con banda subterminal.
  • Macho mayor que la hembra y más prominente.
  • Paloma doméstica.
  • Se trasladan en bandada, yunta e individualmente.
  • Se base de la alimentación son las semillas pero pueden variar su dieta.
  • Fácil adaptación a los diferentes hábitats.
  • Se reproducen hasta cinco veces por año.

Lugares más poblados por la raza en La Plata:
 El lugar con mayor cantidad de palomas, según la investigación de la Bióloga laura Ferman, es la Terminal de Ómnibus con un promedio de 3000 individuos. Luego le sigue la Catedral con aproximadamente 2500 ejemplares. Más atrás, siguiendo con el listado, se encuentran el Pasaje Dardo Rocha con una cantidad aproximada de 1000 palomas, el Museo de Ciencias Naturales y el Hospital de Niños con más de 700 y con alrededor de 500 individuos el Policlínico San Martín.


La Plata, una ciudad ruidosa.
LOS NIVELES DE RUIDO SUPERAN LOS LÍMITES PERMITIDOS

El daño auditivo producido por los altos niveles de ruido puede ser irreversible por lo que la prevención y la toma de conciencia son fundamentales para disminuir el daño en las personas. En el centro, el decibelímetro llegó a marcar hasta 96 decibeles.

Durante los últimos cinco años la Ciudad de La Plata ha registrado niveles de ruido superiores a los permitidos por la Organización Mundial de la Salud (O.M.S). Esta contaminación sonora supera los niveles que puede soportar las personas sin sufrir consecuencias. En la actualidad el tránsito y los boliches bailables son los principales factores de ruido.
El último tiempo los platenses se han malacostumbrado a soportar niveles superiores a los permitidos. “El nivel permitido de acuerdo a la O.M.S, establece que en las calles no debe superar los 65 decibeles para que la gente viva psicoacústicamente bien, en confort psicológico”, dijo la Doctora en Fonoaudilogía Silvia Bermúdez.
Si bien hasta 80 decibeles no se produce daño auditivo, para vivir confortablemente no se debe superar los 65 decibeles, explicó la Doctora.
Los principales causantes de contaminación provienen de dos fuentes, las móviles y las fijas. El primer grupo esta integrado en su mayoría por el transito vehicular. En el país, la ley nº 24.449 de Tránsito y Seguridad Vial hace referencia a los requisitos para la bocina y para la emisión de ruidos. Con respecto a la bocina, establecen un máximo de 104 dBA. “Lo que más afecta son las motos con los caños de escape que hacen como tiros, los colectivos y los autos con la música a todo lo que da”, manifestó Sergio, dueño del puesto de diario de Diagonal 79 y Plaza San martín. El segundo grupo esta integrado por los boliches bailables, los eventos deportivos, recitales, etc. Desde el municipio se está invitando a los padres por el código de nocturnidad, que exige a los boliches y pubs la colocación de paneles acústicos pero todavía no se ha implementado.
En ambos casos los niveles han superado ampliamente los permitidos, llegando a casi 100 decibeles. Otros factores pueden ser los relacionados con lo doméstico como el motor de los electrodomésticos o el uso cotidiano de auriculares.
Todos estos factores pueden producir grandes daños en la salud de las personas, muchas veces irreversibles. “Lo primero que aparee son los zumbidos en el oído, lo que se denomina Acúfeno, que puede aparecer en alguien que se expuso a ruidos como asistir a un recital”, informó la Licenciada en Fonoaudiología Noelia Gwozdz. Esto puede ser intercalado con jornadas de silencio para que así el oído se recupere, desarrolló Gwozdz. Además del Acúfeno, se puede producir Hipoacusia, dejando una disminución de la audición de forma definitiva.
A nivel del organismo en general los principales problemas pueden ser alteraciones en el sueño, trastornos de ansiedad, violencia, problemas gástricos, problemas cardíacos, inconvenientes para concentrarse, alteraciones en la comunicación, disfonías, etc. Esta contaminación sonora no solo afecta a las personas, sino también a los animales. “En las Cataratas del Iguazú el ruido de los helicópteros alejó a varias especies del lugar”, comentó a modo de ejemplo la Licenciada Gwozdz. Otro factor es la pirotecnia que afecta mucho a los animales domésticos que son más sensibles a los ruidos.
A modo de prevención la Doctora Bermúdez y la Licenciada Gwozdz sostuvieron que en el caso de los recitales, eventos deportivos y boliches se pueden realizar tapones protectores. Estos pueden ser los denominados “campana” utilizados para la construcción. Otra alternativa es la realización de los tapones acústicos a medida, tomando la forma del oído para luego confeccionarlos de silicona, amortiguando el sonido unos 30 decibeles. “Es muy importante la toma de conciencia de todos, tratar de controlar periódicamente los artefactos de la casa, que los vehículos estén autorizados por la Verificación Técnica Vehicular para que porten caños de escape autorizados, no tocar bocina porque si, no utilizar el lavarropas a la madruga, etc.”, remarcó Bermúdez. Desde el Colegio de Fonoaudiologos se realizan congresos para concienciar a la gente ya que se cree que lo más importante es que todos contribuyan a disminuir el nivel. Todos los cuartos miércoles de abril, para el día de la Conciencia del Ruido el Colegio sale a la calle con el decibelímetro para registrar los niveles y así contribuir con su propósito que es promover a nivel mundial el cuidado del medio ambiente acústico y la conservación de la audición.

Ruido, algo cotidiano
Las calles por de La Plata que han registrado los mayores niveles de contaminación sonora son 7 y 50, 7 y 51, 8 y 50 y en general las proximidades del centro platense, son las calles más ruidosas. A estas se le suman 12 y 54, la Terminal de Ómnibus, Plaza Italia y Plaza  Moreno. En estos lugares, el nivel no bajado de 85 decibeles, aunque en 7 y 50 se ha llegado registrar hasta 96 decibeles superando ampliamente el permitido. “Entre las dos y las cuatro de la tarde se calma un poco, pero tanto a la mañana, al mediodía o a las seis de la tarde se nota mucho más, al igual que los fines de semana” resumió Sergio del puesto de diario próximo a Plaza San Martín.
El daño auditivo es irreversible por lo que con una medicación o cirugía no se recupera. Por esto mismo prevenir es lo fundamental para reducir los efectos de una ciudad que se hace escuchar. “Muchas veces llego a mi casa y me duele la cabeza o le grito a mi familia y eso es por acostumbrarse al ruido de la calle”, manifestó Omar el pochoclero de Plaza San Martín.
En La Plata no hay todavía legislación sobre los niveles de ruido permitidos. Si bien la gente que circula habitualmente por los lugares más afectados hace referencia al malestar que el ruido causa, es un problema al que todos nos vamos acostumbrando de algún modo; algo que puede terminar siendo letal para nuestros oídos.

Continúan las obras del Monumento Histórico de La Plata.
REMODELACIÓN Y PUESTA EN VALOR DE LA FACHADA.

El reacondicionamiento del Museo de Ciencias Naturales, continúa en marcha. En el mes de octubre comenzó la primer parte de la obra y se intentará mantener su diseño original y darle una mejor imagen para recuperar todo su esplendor.

En octubre se puso marcha la recuperación y puesta en valor de la fachada del Museo de Ciencias Naturales platense, ubicado en el centro del Paseo del Bosque al lado del Zoológico. La obra se dividirá en dos etapas y llevará aproximadamente unos 120 días. Durante la restauración el museo permanecerá abierto al público.
Las obras, se realizarán tratando de preservar todos los valores arquitectónicos de la época, especialmente las molduras y la ornamentación que se tuvieron en cuenta durante la construcción. “Tratamos de poner todo original, el color, las maderas de Europa como cedro o caoba, al igual que las cerrajes inglesas”, dijo Jorge Ferioli, encargado de las refacciones y obras del museo.
El Museo ha sufrido variados problemas en cuanto a su infraestructura debido al paso del tiempo. Desde el Directorio del establecimiento manifestaron que el reacondicionamiento comenzó en el 2005, pero que las obras que comenzaron en octubre son las más visibles.
Pero las obras actuales no solo son de pintura. “Implica una sesión de hidrolavado para sacar todos los hongos y la pintura vieja. Luego la vuelta al color original mediante cataciones de colores, la restauración de los bustos y de los frisos que son parte de la ornamentación”, explicó la Arquitecta encargada Mariela Amor. Así mismo, detalló que se está haciendo una restauración integral de las ventanas, los postigotes, puertas fundacionales, cambio de vidrio y un tratamiento sobre los hierros haciendo una prevención corrosiva cubriéndolos con solutos de conservación y antióxido.
La recuperación y puesta en valor se dividirá en dos etapas. La primera incluirá mejoras en el frente de acceso al museo, ubicado en el primer nivel. También serán restaurados los emblemáticos “tigres dientes de sable” (smilodon) dispuestos en los laterales de la escalinata de ingreso a la edificación. “Hace seis meses que estamos, además de la fachada, con la carpintería estilo francesa. Se hicieron arreglos de parches, tapados de agujeros y un trabajo importante en reponer todo lo que son las fachebas, los pomos y toda la cerrajería original de 1880 que era inglesa. Para eso de tomaron moldes y se copiaron para mantener el estilo”, detalló Ferioli.
En cuanto a la segunda etapa esperan comenzarla antes de fin de año y abarcará el resto del perímetro del inmueble y el frente de los pisos superiores.
Previo a las obras actuales se hizo un saneamiento de la humedad. Esta ha sido un gran conflicto que ha tenido que sufrir el edificio hace ya varios años. “No se puede pintar cuando hay humedad en cimientos”, dijo la arquitecta. También hizo referencia a la entrada de agua en los ornatos, ya que las palomas anidan en los desagües generando un colapso y haciendo que se filtre agua en las paredes.
Desde el 2005 la preocupación por la humedad aumentó, ya que se realizó un tratamiento intensivo de la humedad en los cimientos para tratar de eliminar las filtraciones de agua hacia el interior del establecimiento.
Si bien estos conflictos han perjudicado la promoción y la buena imagen del Museo, este siempre permaneció abierto y la concurrencia de gente no disminuyó. “Esta bueno que un edificio tan representativo de la ciudad se cuide y se proteja”, dijo una maestra de primaria del Albert Tomas. Este testimonio muestra la mirada positiva y el apoyo al emprendimiento.
El costo de la obra se espera que sea superior a 400 mil pesos, solo la primera etapa. Esta será financiada por la presidencia de la UNLP, la facultad de Ciencias Naturales y el Museo. También se espera un aporte de la Jefatura de Gabinete Bonaerense y empresas privadas, a través de la Fundación Museo La Plata. Para la segunda etapa también se prevé un apoyo del ministerio de Planificación Federal, Inversión Publica y Servicios de la Nación.
Si bien se espera que para diciembre se finalice la primera etapa, dependerá de los recursos económicos con los que se dispongan y de los presupuestos de las empresas encargadas de la remodelación.

Un orgullo de 124 años.
El histórico edificio fue fundado por Francisco Palacio Moreno, quien también fue su primer Director y declarado vitalicio. Comenzó a construirse en 1884 y cuatro años más tarde se inauguró, llegando hoy a 124 años. La construcción fue una inspiración de los grandes museos europeos, específicamente los británicos, que reflejan una similitud con el estilo clasista que tiene el de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), perteneciente a esta desde 1906.
El Ingeniero Carlos Heymann y el Arquitecto Enrique Aberg se encargaron de hacer realidad el edificio. Este, a pesar de haber sufrido modificaciones y ampliaciones, mantiene su estilo y estructura original, por lo que en 1997, fue declarado como Monumento Histórico Nacional.
Este último mide 135 metros en su eje mayor y 70 en su eje menor. Tiene un nivel de basamento, dos plantas y dos entrepisos. En su interior contiene veinte salas de exhibición permanente, alberga más de 3 millones de objetos, los cuales no están vivos, sino disecados, embalsamados o taxidermizados.
“Es importante que el año que viene se continúen las obras, este museo es de gran importancia internacional y se acercan miles de turistas, durante todo el año de todo el mundo”, destacó Ferioli que se ha sorprendido por la concurrencia de gente en esta parte del año.
El Museo de Ciencias naturales de la UNLP está siendo considerado por las autoridades municipales, de gran importancia para incentivar el turismo de la ciudad. Aunque todavía esta en proceso se espera que finalizada las obras, la concurrencia de turistas aumente y se siga promulgando el cuidado y la visita del Monumento Histórico.

“El de los leones”

El Museo de Ciencias Naturales es muy conocido por sus dos características estatuas del felino Smilodón Populator de la familia de los macairodóntinos. Esta raza es también conocida como “tigre dientes de sable” por poseer dos enormes caninos, que lo convierten en uno de los mamíferos prehistóricos más conocidos por el público general. Sus colmillos podían llegar a medir de 25 centímetros de largo y podía abrir su boca unos 120 grados. El macho más grande de la especie Smilodon populator pudo pesar hasta 300 kg, rivalizando con el tigre actual por el título de félido más grande de todos los tiempos.
El Smilodon se extinguió hace aproximadamente doce mil años. Otras víctimas de esta extinción fueron los mamuts y los ciervos gigantes. Independientemente de las causas de la extinción, estas no afectaron al mamífero, que se vio perjudicado por la falta de presas de caza produciendo la falta de alimento su verdadera desaparición.
Se han encontrado restos fósiles de las diferentes especies de Smilodon en Estados Unidos, América Central y Sudamérica.


Visite el Museo:

Dirección: Paseo del Bosque s/nº – B1900FWA – La Plata – Buenos Aires – Argentina
Teléfono: (00 54 – 221) 425-7744 / 9161/ 9638
Horario: De martes a domingo de 10:00 a 18:00. Venta de entrada hasta las 17:30 Hs.
Abierto los lunes feriados y cerrado el 1º de enero, 1º de mayo, 24, 25 y 31 de diciembre.
Entrada:
  • General $6
  • Menores de 12 años: gratis
  • Jubilados y pensionados (con carnet) $1.50
  • Estudiantes universitarios nacionales (con libreta): gratis
  • Martes (no feriados) gratis
  • Grupos de escuelas públicas (35 alumnos): gratis 
  • Grupos de escuelas privadas (35 alumnos): $10
Adicional para fotografiar: $2El Museo de La Plata permite la toma de fotografías para uso personal y no comercial. Está prohibida el uso y reproducción de fotografías en medios impresos, digitales y/o audiovisuales sin previa autorización.
La entidad tiene el servicio de las visitas guiadas. Estas se realizan de martes a viernes a las 11: 00, y los sábados, domingos y feriados a las 11:00, 13:00: 14:00 y 16:00
Las visitas guiadas son gratuitas y no están permitidos guías ajenos al Museo de La Plata.


¿Como llegar?
El Museo se encuentra en el centro del Paseo del Bosque de La Plata, al lado del Zoológico y frente al Anfiteatro Martín Fierro. 
Desde la Ciudad de Buenos Aires en Tren, tomando Metropolitano l Línea Roca desde Constitución hasta Estación La Plata (Av.1 y Av. 44). En Ómnibus: Empresa Costera Metropolitana, desde Retiro y Constitución hasta Terminal La Plata (calle 4 e/ 41 y 42), o Empresa Plaza desde Once, Retiro y Constitución hasta Terminal La Plata (calle 4 e/ 41 y 42). En Auto, Autopista La Plata - Buenos Aires, Distancia 55 km (Coordenadas para GPS: Latitud 34º54'31'' S  Longitud 57º56'08''W)